
En el vídeo podemos apreciar como este sujeto brinca una barda para ingresar a la casa y llega como si nada a saludar al señor que se encontraba en su silla, se puso a platicar un poco con el hasta que saco el arma y comenzó a quitarle sus pertenencias.
Lamentable que estos dementes no respeten ya a nadie y menos a personas que no pueden defenderse esperamos que las autoridades puedan hacer algo con estos ratas que siguen en la calle haciendo de la suya.